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Mostrando las entradas de septiembre, 2024

Hoy es viernes

 Buenos días. Hoy es viernes. Hay que intentar y hay que vivir. Vida es esperanza, que no es lo mismo que el optimismo. No es la certeza de que todo saldrá bien, sino la convicción de que hacer algo tiene sentido independientemente de como resulte. Si tiene sentido inténtelo. Si vale la pena el dolor que como consecuencia puede causar, hágalo. La vida es al final el recuento de todos los intentos. Aquí estamos para vivir mientras el alma suene. Aquí estamos para morir cuando la hora llegue. Desde ahora y para siempre en los albores    que la vida nos trae. Nacer es simple. Morir importa poco. Lo que importa son los intentos de la vida. Como dijo Borges: "Que importa que nos condenen a la muerte, malo fuera que nos condenen a la eternidad". Varios intentos es la vida. Un solo intento es la muerte. Opaito

La esperanza no es lo mismo que el optimismo.

 La esperanza no es lo mismo que ser optimista. No es la convicción de que todo saldrá bien, de que todo tendrá un resultado positivo. Es más bien el convencimiento propio de que hacer algo, intentar algo, tiene sentido independientemente de como resulte. En la vida sólo se obtiene aquello que se ha intentado y se debe intentar todo aquello que para nosotros tiene sentido no importa la cosa, sin embargo, es necesario pensar hacia donde nos conducen nuestros intentos para que no pierdan el sentido.  El final de una vida exitosa debe ser como la definió Neruda, saber que  se intentó todo lo que se quiso, se  obtuvo todo lo que se pudo, se amo todo lo que valía la pena y  se perdió perdió apenas lo que nunca fue propio. En la historia de una vida, todo lo que existe en el mundo nos pertenece, incluyendo las propiedades materiales, pero la única manera de saber que algo no es propio es intentándolo. ¿Cuantas cosas que pudieron ser se han perdido por miedo a  que no resulten y por eso jamás

Decia Einstein.

 Decia Einstein que cuando te mueres, no sabes que estás muerto. Tú muerte sólo la sienten y lamentan los vivos de tú entorno. Asímismo ocurre con los estúpidos. Uno no debería molestarse por la estupidez ajena, pero cuando logra alcazar ciertos niveles de conciencia, es bien dificil. Yo sé que siempre ha habido estúpidos, pero antes que ahora, la estupidez era vista como una vergüenza. Los estúpidos reconocían su estupidez, eran concientes de ello, porque en muchos de los casos, no tuvieron acceso a la educación, eran analfabetos. Sin embargo, los estúpidos de hoy, son los peores, tienen acceso a la educación, saben leer y escribir, pero no son capaces de generar ni una sola idea del pensamiento, ni muestran el mas minimo interés por la compresión de las cosas. Muchas de las veces, se jactan de sus estupideces, porque con ellas divierten precisamente a los otros estúpidos en la escala jerárquica, a la gran mayoría de pendejos. Es una pena en la Administración del estado dominicano, ha